Corbera
Valencia
La 5ª RUTA CON NANOS POR VALENCIA que os traemos hoy es la RUTA DEL CAVALL BERNAT EN CORBERA.
Recuerdo que esta ruta la hicimos hace más de diez años con unos amigos, cuando aún no teníamos nanos. Y entre mis vagos recuerdos, me acuerdo de la subida hacia LA CREU DEL CARDENAL, fácil pero costosa, me acuerdo de las impresionantes vistas al llegar arriba y me acuerdo caminando por la cresta de la montaña divisando el horizonte infinito de tierra y de mar.
Hablando hace unas semanas, comentamos que podríamos repetir aquella ruta tan chula con los nanos, que pensábamos ya estaban preparados para hacerla y les iba a encantar.
Y así lo hicimos. La programamos para hacerla un sábado a mediados de junio por la mañana. Pero a medida que se iba acercando el día, viendo que el calor no paraba de apretar y las temperaturas iban aumentando cada vez más, decidimos programarla para la tarde. Pero por la tarde también hacía mucho calor, así que al final, la misma mañana, junto a los amigos con los que íbamos a hacer la ruta, decidimos empezarla sobre las 18h30, hora en la que la temperatura ya empezaba a bajar y el calor ya no era tan abrasante… Además, recordábamos que la primera hora de recorrido iba por una pista con sombra, entre los árboles. Así que, para cuando llegásemos a las zonas de sol, ya habría caído la tarde y no sería el calor tan asfixiante.
Llegó el día y llegó la hora. A las 18h30 iniciamos la ruta tal y como estaba previsto. Dejamos los coches en el PARKING DE LA MURTA y arrancamos desde el PUNTO DE INFORMACIÓN DEL PARAJE NATURAL DE LA MURTA.
Andamos más o menos 1,4km por una pista en sombra, hasta el MONASTERIO JERÓNIMO NUESTRA SEÑORA DE LA MURTA. Cruzamos el PUENTE DE FELIPE II para acceder al Monasterio, actualmente en ruinas y vallado para la seguridad de los caminantes. Y gracias a los carteles pudimos hacernos una idea de la magnitud del Monasterio en aquellos siglos (del XIV al XIX), por la construcción en sí y por su ubicación en aquel paraje natural tan espectacular.
Continuamos la marcha por la pista en dirección a la CREU DEL CARDENAL. Seguimos por la sombra aunque con una pendiente suave durante los primeros 700m. En el 1,5km siguiente, la subida por la pista ya empieza a ser más pronunciada, y aunque no hace tanto calor como por la mañana, estamos sudando la gota gorda. A medida que vamos subiendo podemos disfrutar de las vistas que se abren sobre la MURTA y vemos el MONASTERIO rodeado por la vegetación y el parking que cada vez queda más lejos. LAS VISTAS SON PRECIOSAS. EL BOSQUE ES MUY DENSO Y ESTÁ TODO VERDE.
Nos hemos separado ya en dos equipos, el equipo de las nanas mayores con el enano del grupo, a la cabeza con un mayor, que van tirando del grupo y tienen que parar constantemente a esperar al segundo grupo. Y el resto tirando de las dos enanas que van muy relajadas, a su aire, sin prisa. Aún así vamos a buen ritmo, hemos recorrido unos 3,6km en 1h30. Vamos bien de tiempo.
Y sabemos que la ruta es de unos 10km y unas 4h30 ó 5 horas, dependiendo del ritmo. La hora prevista de llegada al parking es sobre las 23h de la noche, por lo que la idea es subir de día los tramos de trepada, con más peligro y dificultad, y ver atardecer en el CAVALL BERNAT y bajar cuando empieza a anocher sobre las 21h30 para estar bajo como muy tarde a las 23h30.
La SEÑAL CREU DEL CARDENAL-PAS DE SANT SOFÍ, nos indica el camino por el que hay que continuar. En este punto empieza ya el sendero angosto de tierra y roca entre matorrales. Lo recorremos unos 900m. A estas horas de la tarde, el paisaje está precioso. Se ven los verdes de muchas tonalidades, intensos. Las paredes verticales que antes parecían gigantes e inalcanzables, ya están aquí a nuestra vera, cada vez más cerca de ellas y cada vez más lejos del punto de partida, que se ve ya como una pequeña mancha blanca salpicada sobre el manto verde.
Después de parar muchas veces a lo largo del camino para beber agua, para no deshidratarnos porque aunque corre el aire, sigue siendo una tarde cálida.
Llegamos por fin a nuestro PRIMER COLLADO. Son las 20h40. Hemos andado unos 4,5km en unas 2h10min y hemos subido unos 314m de desnivel. ¡Estamos muy felices cuando al subir el último tramo, aparece ante nosotros el MAR! A caballo entre el PARAJE NATURAL DE LA MURTA y la ZONA COSTERA DE LA RIBERA BAJA, podemos disfrutar de las maravillosas vistas en los 360º. La RIBERA ALTA, LA RIBERA BAJA y hasta LA HUERTA SUR DE VALENCIA. ¡Y EL MAR! ¡NUESTRO MAR MEDITERRÁNEO! ¡ESPECTACULAR! Ha merecido mucho la pena el esfuerzo que hemos realizado nanos y mayores para llegar hasta aquí. Una RECOMPENSA ÚNICA QUE NOS REGALA LA NATURALEZA. La montaña de Cullera desde aquí se ve diminuta…
Descansamos unos minutos y seguimos la ruta porque aún nos quedan unos pasos complejos y el último tramo de trepada, en la canal para llegar al CAVALL BERNAT, que aunque no es complicado, queremos pasarlo de día, por la tranquilidad y la seguridad de los nanos.
Seguimos recto, trepamos un poco y llegados al PAS DE SANT SOFÍ, rodeamos el ESPOLÓN por la izquierda, por un sendero muy estrecho y con pasitos en los que hay que ir con mucho cuidado porque aunque no son difíciles, hay una buena caída. Cada nano acompañado de un adulto en este punto.
Recorrido medio kilómetro, llevamos unos 5km de ruta y 2h35 de camino. Por lo que a las 21h05, aún de día, llegamos a la CANAL, una subida sin dificultad por la roca entre dos montañas, en donde en algunos tramos hay que ayudarse de las manos para superar algunos escalones. Y que conforme vamos ganando altura, la trepada se vuelve más vertical, sobre todo en el último tramo de la canal, que es donde hay que llevar más precaución. El camino está encañonado, por lo que no es complicado. Aunque seguimos con un nano por adulto, para ayudarles y acompañarles en cada paso. La subida por la CANAL son 700m y unos 45m de desnivel.
Normalmente, siempre que podemos nos gusta llevarnos a las perras de ruta, porque igual que disfrutamos nosotros, disfrutan ellas. Así que, nos las llevamos a hacer la ruta, y nuestros amigos también trajeron a la suya. Todo iba bien, hasta que llegamos a la canal, y una de nuestras perras empezó a encontrarse cansada y tenía dificultad para subir por las rocas. Las otras dos perras en la cabeza del equipo ya estaban arriba con los nanos y dos adultos esperándonos, que habían tardado unos 15minutos en subir la canal. Nos quedamos los otros dos adultos y empezamos a ayudarle a subir y conseguimos que subiera hasta la mitad de la canal. Pero no sé si por el calor, por el cansancio, o una mezcla de todo, a mitad camino se paró y dejó de andar. Pensamos que le dio un golpe de calor. Y a partir de ahí ya no se movió del sitio. Bajó otro adulto a ayudar a la perra y subió otro adulto a quedarse con los nanos. Y mientras esperábamos a que la perra reaccionase, subimos a los nanos al CAVALL BERNAT que estaba ya sólo a unos 100m, a que esperasen allí con un adulto. Le dieron agua, algunos bocadillos que llevábamos, pero nada. Estaba agotada y no podía andar. Estuvimos más de una hora, esperando a ver si reaccionaba. Pero nada. Así que, cuando ya había empezado a oscurecer, tuvimos que tomar decisiones rápidas porque había que bajar a los nanos de la montaña antes de que se hiciera muy tarde , porque ya empezaban a estar cansados y nerviosos por la situación.
La prioridad a esas horas era bajar a los nanos de la montaña. Pero a la vez, no podíamos dejar a la perra sola en la canal. Fueron unos momentos muy tensos, porque la perra pesa 35 kg y no podíamos cargar con ella de ninguna manera, y si no andaba era imposible superar el último tramo de la canal, por el cual podríamos haber tenido un accidente. Así que Quique, el más experto del grupo en la montaña decidió quedarse con la perrita para darle un poco más de tiempo para ver si reaccionaba. Separar al equipo y dejar a uno de los nuestros solo en la montaña con la perrita, pensando que les tocaría pasar en la canal toda la noche, era una idea que no nos hacía nada de gracia. Pero la noche era muy cálida, no hacía frío y Quique tenía muchos bocadillos, unos 2,5l de agua para él y unos 2,5l de agua para la perra. Y los nanos tenían que bajar ya, porque aún nos quedaban unos 4km de ruta de bajada hasta el parking de la Murta.
Así que, no nos quedó otra alternativa y el resto del grupo nos pusimos otra vez en marcha. Eran las 22h15, habían pasado unas 3h50 y habíamos recorrido un total de 5,7km. Aún teníamos unas dos horas y pico de caminata por delante. Nos pusimos los frontales y empezamos el descenso.
Recorrimos unos 400m por un sendero estrecho, entre matorrales. Y a partir de ahí iniciamos el descenso por la cresta por un buen sendero bien señalizado sobre roca, durante 1,2km aproximadamente. Como he dicho antes, tuvimos suerte de tener una noche cálida y despejada. El cielo estrellado, precioso. No hacía nada de frío, la temperatura era agradable a esas horas después de tanto calor. Y el paisaje nocturno era impresionante. Con la noche clara se podía divisar kilómetros y kilómetros a la redonda. En todas las direcciones, luces de los pueblos,… Una pasada. Si no fuera porque la incertidumbre de lo que iba a pasar con Quique y la perra y porque los nanos estaban asustados por ellos, hubiésemos disfrutado de una ruta espectacular de día y de noche. Pero los ánimos ya estaban bajos y sólo pensábamos en llegar lo antes posible a los coches.
Mientras tanto, íbamos hablando con Quique, que había intentado subir a la perra por la canal después de un rato de descanso, pero fue imposible. Así que cuando se quedó a oscuras en la canal y empezaron a atacarles montones de mosquitos, decidió que allí no podían quedarse más rato y empezó a bajar a la perra.
No llevaba nada que le pudiese servir para colgarse a la perra a la espalda y así bajarla poco a poco. Así que, montó una especie de arnés con las dos correas de las perras que llevaba y empezó a bajar a la perrita, que, pese a que no andaba, apoyaba las patitas delanteras para frenar la caída. Así bajaron toda la canal. Y así deshicieron los pasos complicados hasta llegar al PAS DE SANT SOFÍ.
Me contó Quique que allí estuvieron descansando un buen rato mientras le daba de comer y de beber a la perra para ver si volvía en sí el animal, pero nada.
Cuando salimos de la cresta, ya habíamos recorrido unos 7,3km y llevábamos unas 4h40 contando la hora que habíamos estado parados esperando a que se recuperase la perrita. Cuando vimos una señal que ponía que quedaban unos 2,7km hasta el PUNTO DE INFORMACIÓN. Empezamos a bajar por una senda de tierra suelta y rocas, otra vez entre matorrales, durante unos 800m, hasta que llegamos a una pista. La recorrimos durante aproximadamente 1,4km hasta que llegamos a una bifurcación del camino, pero sólo estaba indicado a mano izquierda el MONASTERIO a unos 25minutos. Mirando el GPS, decidimos coger el camino de la derecha, que aunque no estaba señalizado, parecía que llegaba más rápidamente al parking.
Hablamos con Quique que nos dijo que había bajado a la perra por el camino entre matorrales y que había llegado a la pista, desde donde quedaban unos 3,6km hasta el parking. Quedamos en hablar cuando llegásemos al parking para ver por dónde iba. Estábamos ya más tranquilos porque ya habían pasado los peores tramos y cada vez estaban más cerca del punto de partida, y sobre todo porque ese camino ya era mucho más accesible y ya no había peligro.
Hicimos la bajada a toda prisa, así que los nanos ya estaban reventados llegados a este punto. Y finalmente en 15 minutos, llegamos al parking.
Eran las 00h30 de la madrugada, unas 6horas después del inicio, habíamos andando durante unas 4h30, habíamos descansado aproximadamente 1h30 y habíamos recorrido un total de unos 10,3km.
Los nanos extenuados se quedaron dormidos en el coche al momento. Llamamos a Quique y nos dijo que estaba a unos 2km del parking pero que la perra ya no se movía. Que le había vuelto a dar agua y comida pero que ahora ya no quería moverse. Era ya la 01h00 de la madrugada y no podíamos quedarnos así hasta las 8h00 que vieniera el guía al PUNTO DE INFORMACIÓN. Así que, tuve que llamar a mis padres para que nos trajesen un carrito de bebé para poder bajar a la perrita de la pista. Tardaron en llegar, más de una hora. Mientras Quique dejó atada a un árbol en la pista, a la perrita que no se movía, y bajó hasta el coche porque llevaba horas sin agua para él y estaba deshidratado.
A las 02h30, cuando llegaron mis padres, cogimos el carrito y nos fuimos a recoger a la perra. No sabíamos cómo nos la íbamos a encontrar porque estaba hecha polvo. Pasamos un rato angustioso, pensando que igual se creía que la habíamos abandonado en medio de ese bosque. Y finalmente, después de unos 2km andando, allí estaban sus ojitos brillando en la oscuridad…Tirada en el suelo, moviendo la colita y medio llorando de la emoción de vernos…
Le dimos de comer y de beber, la enrollamos en una manta y la subimos al carrito. Iba como un bebé. Y no se movió ni un pelo en todo el camino…
A las 3h40 llegamos a los coches, y ya todos juntos nos volvimos tranquilamente a casa. En el coche los nanos abrieron los ojos y pegaron un bote de alegría al ver a su padre y a la perrita, los cuales habían pensado que no volverían a ver…
Y yo sinceramente, no sé cómo Quique consiguió bajar a la perra del pico de la montaña, porque yo misma con otro adulto estuvimos un buen rato intentando moverla y con lo que pesa, no podíamos con ella… Así que, me imagino que Quique debió sacar esa fuerza bruta que a veces dicen que sacan las personas en situaciones límite para poder recorrer tantos kilómetros con ella a cuestas y no tener que dejarla sola atrás.
Y esto es la montaña. A veces por mucho que programas las rutas, no siempre salen las cosas como uno espera. Hemos hecho cantidad de rutas y casi siempre ha ido todo fenomenal. Pero la montaña está llena de imprevistos. Equivocarte de camino, perderte, una lluvia, una torcedura de tobillo, una caída, un golpe de calor,…, cualquier cosa puede cambiar la marcha de la ruta, y hay que estar preparados en cada situación para tomar rápidamente la decisión más correcta en cada momento. Y luego, que la suerte te acompañe o no…
En nuestro caso todo salió bien y llegamos todos bien a casa. En un par de días la perrita ya estaba recuperada y haciendo vida normal. Aunque seguro que a la montaña, a estas rutas más largas, ya no la volvemos a llevar.
Eso sí, tengo que decir que, al CAVALL BERNAT volveremos en breve, cuando no haga tanto calor, sin las perras, para quitarnos esta espinita y no quedarnos con este recuerdo, porque es una RUTA ESPECTACULAR. PRECIOSA DONDE LAS HAYA. CON ESAS VISTAS TAN MARAVILLOSAS DE NUESTRO PAISAJE MEDITERRÁNEO Y PASEANDO POR LA CRESTA DE LA MONTAÑA DEJANDO TODO ATRÁS, COMO SI NADA IMPORTASE A TU ALREDEDOR.
DESCRIPCIÓN:
Se trata de un RECORRIDO CIRCULAR de DIFICULTAD MEDIA, por el tramo desde el PAS DE SANT SOFÍ hasta la CANAL y por la CANAL de subida al CAVALL BERNAT. Que aunque no son díficiles, tienen unos pasos que hay que llevar cuidado.
Es un recorrido de aproximadamente 10,3Km, cuya duración y según la edad de los nanos ronda las 6horas, de las cuales, 4h30 son de caminata y 1h30 de descanso en nuestro caso.
El desnivel es de 418m y el desnivel máximo acumulado en el ascenso es de 442m y en el descenso de 452m.
La ruta está muy bien señalizada y no hay ninguna pérdida. Nosotros hicimos la bajada desde el CAVALL BERNAT hasta el PARKING DE LA MURTA, y no tuvimos ningún problema en encontrar la ruta. Cada pocos metros había una nueva señal.
RUTA POR TRAMOS:
1-TRAMO 1: PARKING-PUNTO DE INFORMACIÓN-MONASTERIO-1,4km- POR PISTA
2-TRAMO 2: MONASTERIO-SUBIDA SUAVE-700m- POR PISTA
3-TRAMO3: SUBIDA SUAVE-SUBIDA MÁS PRONUNCIADA-1,5km- POR PISTA
4-TRAMO 4: SENDERO ENTRE MATORRALES-SUBIDA AL PAS DE SANT SOFÍ-900m- POR SENDERO
5-TRAMO 5: PAS DE SANT SOFÍ A CANAL-500m
6-TRAMO6: CANAL-700m
7-TRAMO 7: CANAL A CAVALL BERNAT-100m
8-TRAMO 8: CAVALL BERNAT-SENDERO MATORRAL-400m
9-TRAMO 9-CRESTA-1,2km
10-TRAMO 10: BAJADA TIERRA-800m
11- TRAMO 11:PISTA-BIFURCACIÓN-400m
12-TRAMO 12: PARKING-800M
NOTA:
Hacer esta ruta en primavera o en otoño. En verano hace demasiado calor para hacerla por el día. Y que sea un día que no haya previsión de lluvia, porque puede ser peligroso en las zonas que hay que trepar por la roca.
Llevar mucha agua. Nosotros llevábamos 13L de agua para 9 personas y 3,5L para 3 perros. Y nos quedamos cortos..
CÓMO LLEGAR
Tenéis que llegar hasta ALZIRA y desde allí dirigiros al PUNTO DE INFORMACIÓN DEL PARAJE NATURAL DE LA MURTA. Está bien señalizado. Os dejamos de todas formas el punto de partida para insertar en el GPS, y así no tenéis pérdida.
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FOTOGRAFÍAS Y TEXTO:
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